Al adquirir una propiedad, en muchos casos significa comprometerse a pagarlo durante 10 a 20 años, por ello la mejor manera de proteger esta inversión es inscribiéndola en la SUNARP (Superintendencia Nacional de los Registros Públicos)
Este procedimiento muchas veces no se realiza por desconocimiento del propietario o porque se deja para después.
Importancia de inscribir un inmueble:
Con la inscripción se reconoce como propietario del bien a aquel cuyo nombre consta en la partida registral, el cual goza de un derecho preferente frente a aquellos que no tienen el derecho de propiedad inscrito. Es decir, frente a un conflicto de derechos de propiedad sobre un mismo bien, se dará preferencia al que tenga el derecho inscrito en los registros públicos. Otra ventaja de registrar la propiedad ante los Registros Públicos es que se puede solicitar un crédito bancario.
Qué pasaría si no se inscribe el inmueble:
Aunque este trámite de inscripción no es obligatorio, el dueño que no lo efectúe corre el riesgo de que sus derechos no sean reconocidos y esté en una situación vulnerable frente a estafas inmobiliarias. Por ello es recomendable que después de la compra del inmueble, el contrato de compraventa debe ser elevado a escritura pública en una notaría. Después, la solicitud de inscripción se presenta en la Oficina Registral de la Sunarp, acompañada del título que contiene el parte notarial de la escritura pública de compraventa. La solicitud de inscripción deberá estar acompañada del título que contiene el parte notarial de la escritura pública de compraventa del bien.
Este trámite se realiza previo pago de los derechos registrales, que varían de acuerdo con el tamaño del inmueble. Si no hubiera observaciones, el trámite registral demorará alrededor de siete días hábiles.